viernes, 14 de febrero de 2014

COMO DIOSES

El intocable jerarca que no tiene que responder ante nadie hace de su deseo la voluntad divina, y de su necesidad algo absoluto.

Todos nosotros, de igual forma, al vernos como "la especie superior", casi semi-dioses frente a nuestros cuasi-hermanos genéticos, nos permitimos utilizarlos, sacrificarlos, y maltratarlos como nos place, nos permitimos ser crueles. Dijo un filósofo que la crueldad es uno de los principales placeres del ser humano.

Cuando ponemos en duda ser la "cima indiscutible del Universo", y comenzamos a considerar la posibilidad de que otra especie, o parte de la nuestra se sienta "superior" y nos use del mismo modo (que tal vez pasa a veces o incluso siempre), como un "recurso" para sus necesidades más ocultas, como un consumible para su vanidad y su crueldad, comenzamos a darnos cuenta de lo despótica que puede llegar a ser nuestra naturaleza, y entonces nos volvemos "humildes" y "buenos".

Ponerse en la piel de los otros es muy sano para ver lo que estamos haciendo, o permitiendo hacer. Es difícil casar conceptos como humanidad, empatia, o persona con la visión de otros grandes mamíferos enjaulados y neurotizados en los zoos de las ciudades, y que decir del sacrificio cruel de toros en las plazas públicas para diversión del personal. No podemos dejar pasar de largo la "intuición" de que compartimos con ellos los mismos instintos.

Cosas como estas  reflejan el largo camino que nos queda. Si no somos capaces de controlar el poder que tenemos sobre otros seres con más carencias que nosotros, como vamos ser capaces de conseguir un control adecuado de la energía nuclear, el cambio climático, la destrucción de recursos naturales o el reparto de riqueza. No se quien dijo por primera vez que "la bondad es un gesto de poder", creo que va por el buen camino y nos permite ver donde estamos realmente, cuan cerca estamos aun de la ciega bestia.

¿Por qué no es evidente lo "evidente"? ¿Por qué es necesario llegar a contemplar el "horror" una y otra vez? ¿Por qué no reconocemos que somos el ser que creó el horror de la 2ª guerra mundial? ¿Por qué no reconocemos que somos el ser medieval, el exclavista, el racista, el primitivo homínido?. En un primer momento nuestra vanidad se derrumba, pero con lo aprendido se puede construir unha historia mejor.

No, no es verdad que la Alemania Nazi sea cosa de un loco, ¿quien disparó, quién mató, quien denunció, quién exterminó?. Usamos la crueldad para construir nuestra estructura social y a veces deseamos desbordar los límites, y entonces esperamos por la "voz" que nos justifique, que nos libere de ser libres, en el fondo ese "solo cumplimos ordenes" nos permite la liberar cosas ocultas.

Que placer es ese que buscan los multimillonarios? quien sabe, a lo mejor sacando un capital inmenso de la circulación, usando su poder, contemplando la miseria y el sufrimiento del resto de sus congeneres consiguen un sublime placer prohibido en pago por no hacerlo de un modo más grotesco y evidente.

viernes, 27 de septiembre de 2013

Me lo decía mi abuelito

Me lo decía mi abuelito,
me lo decía mi papá,
me lo dijeron muchas veces
y lo olvidaba muchas más.
Trabaja niño no te pienses
que sin dinero vivirás.
Junta el esfuerzo y el ahorro
ábrete paso, ya verás,
como la vida te depara
buenos momentos. Te alzarás
sobre los pobres y mezquinos
que no han sabido descollar.

Me lo decía mi abuelito
me lo decía mi papá
me lo dijeron muchas veces
y lo olvidaba muchas más.
La vida es lucha despiadada
nadie te ayuda, así, no más,
y si tú solo no adelantas,
te irán dejando, atrás, atrás.
¡Anda muchacho y dale duro!
La tierra toda, el sol y el mar,
son para aquellos que han sabido
sentarse sobre los demás.

Me lo decía mi abuelito
me lo decía mi papá
me lo dijeron muchas veces
y lo he olvidado siempre más.

                    José Agustín Goytisolo

Érase una vez un lobito bueno

Érase una vez
un lobito bueno
al que maltrataban
todos los corderos.

Y había también
un príncipe malo,
una bruja hermosa
y un pirata honrado.

Todas estas cosas
había una vez.
Cuando yo soñaba
un mundo al revés.

 José Agustín Goytisolo


martes, 30 de octubre de 2012

CAMBALACHE

Un tango del siglo XX que le gustaba a alguien que ya no está:


Cambalache
Letra y música: Enrique Santos Discépolo
Tango de 1934

El mundo fue y sera una porqueria 
ya lo se 
En el quinientos seis 
y en el dos mil tambien 

Que siempre ha habido chorros 
maquiavelos y estafaos 
contentos y amargaos 
valores y duble 

Pero que el siglo veinte 
es un despliegue 
de malda insolente 
ya no hay quien lo niegue 

Vivimos revolcaos 
en un merengue 
y en un mismo lodo 
todos manoseaos 

Hoy resulta que es lo mismo 
ser derecho que traidor 
Ignorante sabio o chorro 
generoso o estafador 

Todo es igual 
nada es mejor 
lo mismo un burro 
que un gran profesor 

No hay aplazaos 
ni escalafon 
los inmorales 
nos han igualao 

Si uno vive en la impostura 
y otro roba en su ambicion 
da lo mismo que sea cura 
colchonero rey de bastos 
caradura o polizón 

Que falta de respeto 
que atropelloba la razon 
cualquiera es un señor 
cualquiera es un ladron 

Mezclao con Stavisky va Don Bosco 
y "La Mignon" 
Don Chicho y Napoleón 
Carnera y San Martín 

Igual que en la vidriera 
irrespetuosa 
de los cambalaches 
se ha mezclao la vida 

Y herida por un sable 
sin remaches 
ves llorar la Biblia 
contra un bandoneon 

Siglo veinte cambalache 
problematico y febril 
el que no llora no mama 
y el que no roba es un gil 

Dale que va 
dale nomas 
que alla en le horno 
nos vamo a encontrar 

No pienses mas 
sentate a un lao 
que a nadie importa 
si naciste honrao 

Es lo mismo el que trabaja 
noche y día como un buey 
que el que vive de los otros 
que el que mata que el que cura 
o esta fuera de la ley


http://www.todotango.com/Spanish/las_obras/Tema.aspx?id=T9lldaeHiig=

martes, 2 de octubre de 2012

Metamorfosis de la materia


Cuando leo sobre la historia de la evolución de la vida, o sobre la historia de la materia inerte, siempre hay algo que no acabo de comprender, y que tampoco nadie analiza claramente;  ¿qué provoca que una parte de la materia se independice y tenga voluntad propia de perdurar en el tiempo como individuo y como especie?.

Se dispone de teorías adecuadas para comprender el desarrollo de la vida, y de la materia, pero no acabo de percibir que es lo que origina la  aparición de la vida orgánica.

En todo "ser vivo", microorganismo, planta, animal, o ser humano, la característica básica que les permite considerarse vivos, es que quieren seguir existiendo, se oponen a morir. Existe una fuerza, instinto o voluntad en la materia orgánica que se opone a la disolución molecular, y celular, que se opone al retorno al estado inorgánico, no quiere volver a ser polvo, hidrógeno primigenio, o incluso una sopa de partículas subatómicas. Pero no se conforma con ello, su potencia va más allá, pretende reproducirse a sí mismo, invadir, conquistar espacio vital para sí mismo. No puede ser de otra forma, de lo contrario nunca se pasaría de la primera generación de lo que se considere primer ser vivo.

Freud hablaba de esta "pulsión de vida" (Eros), pero también "de la pulsión de muerte" (Thanatos), como una tendencia a volver al estado anterior, "inorgánico". Todo esto parece estar en concordancia con la manera que tiene de ser el mundo físico, siempre se dan fuerzas o tendencias antagónicas que a veces llegan a un equilibrio.

Estas fuerzas físicas parecen, entonces, manifiestarse en nuestra sique; con lo que llamamos vivir, matar, conquistar, odiar, amar, parir... ¿substituyen a las cuatro fuerzas físicas fundamentales o se siguen como dos más dos son cuatro?.

Y siguiendo un pensamiento puramente científico ¿Cómo un sistema inercial y puramente mecánico puede generar "algo" independiente, y autónomo, con voluntad propia? ¿o es que esa voluntad es la expresión de esa inercia asociativa de las partes constituyentes?.

Estoy pensando en todo esto, tratando de hilar un camino, pensando en la piedra, el agua, y la tierra regadas por el fuego, ...y de pronto entras tú en la habitación, amor mio, con todos tus átomos perfectamente organizados.


viernes, 21 de septiembre de 2012

Creatividad.

Hoy me apetece salir de casa y dar un paseo por las ideas de mi huerta con el fin de hacer una rica ensalada.

El proceso evolutivo natural posee en si mismo las unidades básicas y las normas de interacción entre las piezas, no hace falta nada mas. Cuando las condiciones son propicias en un lugar, comienza el lanzamiento de millones de dados, solo se dará vida donde sea posible que se dé, y será inevitable. La inercia del mundo propiciará el lanzamiento de más y más dados, seguirán apareciendo combinaciones orgánicas que sobrevivan y otras morirán por la aparición de estas, y eso pasará, y seguirán apeciendo una y otra vez posibilidades nuevas que pueden caber en ese organigrama, inteactuando lo viejo con lo nuevo. Paso a paso, un poco más allá, con una velocidad cansina, sin prisa pero sin pausa, empleando miles de millones de años. Los modelos antiguos no se eliminan por antiguos, toda especie, toda posible especie que pueda sobrevivir en el nuevo ecosistema, vive, puede vivir miles y miles de años, incluso para siempre.

La creatividad de nuestra mente es lo propiamente humano, y funciona de manera muy parecida al proceso evolutivo natural, lanzamos hipótesis, imaginamos soluciones, posibilidades, luego escogemos una y la llevamos a la practica, comprobamos si ese modelo imaginado, si esa posibilidad resiste la realidad, la experiencia, el éxito-fracaso. En nuestra vida sentimental funciona también así, a veces, se cortocircuita, cometemos el mismo error una y otra vez, aferrándonos como un naufrago a la deriva a una tabla de madera. 

Escribimos nuestra Historia, destacando lo "importante", y se considera que lo importante son los objetivos conseguidos no el como sino simplemente el fin. Sin embargo, y resulta algo contradictorio, el fin, es decir, lo que hay en el mundo humano, si se aprecia con distancia es "un como se consiguen y hacen las cosas", "un modelo de relación entre los miembros de la especie", el fin parece ser un organigrama, un modelo, por qué no decirlo, una especie de código o ética, que permita la convivencia y la vida, y esto no niega la voluntad de libertad que nace de cada individuo y de cada grupo.

Muchos inciden en que lo importante es sobrevivir, sin duda es el primer paso, pero creo que a estas alturas podemos ya vislumbrar que el "como se vive" es realmente lo más importante de la existencia humana, y posiblemente sea el objetivo que persigue nuestra historia.

Que pena dan esas palabras de comentaristas a sueldo, políticos y empresarios ávidos de beneficios, "...deberíamos aprender de lo chinos, trabajan todo el día, no se quejan, cobran lo que les den".

Pretenden convertirnos en esclavos, ¿para qué?, ¿ para quién?, no merece la pena vivir así, es más digno, más humano, forzar un cambio de modelo.


martes, 4 de septiembre de 2012

La Saeta (Antonio Machado)

¡Oh, la saeta, el cantar
al Cristo de los gitanos,
siempre con sangre en las manos,
siempre por desenclavar!


¡Cantar del pueblo andaluz,
que todas las primaveras
anda pidiendo escaleras
para subir a la cruz!

¡Cantar de la tierra mía,
que echa flores
al Jesús de la agonía,
y es la fe de mis mayores!

¡Oh, no eres tú mi cantar!
¡No puedo cantar, ni quiero
a ese Jesús del madero,
sino al que anduvo en el mar!



Hay poemas que lo dicen todo, sin la necesidad que tenemos algunos de "rumiar" mil pensamientos, tal vez la poesía sea el lenguaje más profundo, más real, para la gente más fuerte, para los que caminan sin disfraz, a pecho descubierto.